jueves, 25 de diciembre de 2014

Charles Dickens, Cuento de Navidad.

Canción de NavidadCuento de Navidad o El cántico de Navidad, cuyo título original es A Christmas Carol, es una novela corta escrita por Charles Dickens publicada originalmente por Chapman & Hall el 19 de diciembre de 1843.


Cuenta la historia de un hombre egoísta llamado Ebenezer Scrooge y su transformación,  tras ser visitado por una serie de fantasmas en Nochebuena. La novela consiguió un inmediato éxito y el aplauso de la crítica.


Muchas son las casualidades de esta obra respecto a la vida del autor.

No fue un camino de rosas. El pequeño Dickens nació en una familia pobre, de clase media pero llena de deudas. Desde pequeño le privaron de una buena educación y hasta los nueve años no pudo entrar en una escuela. Como bien se describió él mismo posteriormente era "un niño muy pequeño y no especialmente cuidado".

 A los doce años, el joven Charles Dickens se vio obligado a trabajar, esta etapa marcaría por completo la vida de Charles, sobre todo cuando su familia empezó a recuperarse económicamente.  Sus padres decidieron entonces que siguiera trabajando a pesar de que estaban gozando de una buena época.

 Esta traición por parte de sus progenitores nunca fue olvidada por el joven escritor y básicamente es el espíritu que inunda la personalidad del protagonista Ebenezer Scrooge. 


 Este "simple" cuento moralista con su tema de redención, suma todo el verdadero significado de la Navidad.

Dickens compartiría que siempre estuvo «profundamente afectado» al escribir Cuento de Navidad, por su inspiración autobiográfica en parte y por la situación económica que tuvo que vivir de nuevo, ya de mayor, dado el inexistente éxito de ventas de Martin Chuzzlewit.


(Fantasma de las Navidades Futuras;"Iba envuelto en un ropaje de profunda negrura que le ocultaba la cabeza, el rostro, las formas, y sólo dejaba a la vista una mano extendida")



La novela rejuveneció su carrera como un renombrado autor y supuso un gran éxito en la historia de la literatura mundial.

En un tiempo en el que Gran Bretaña era el mayor poder político y económico del mundo, Dickens destacó la vida de los pobres olvidados en el corazón del imperio. 

Su ficción era probablemente lo más poderoso para cambiar la opinión pública sobre las desigualdades de clase y así lo hizo. 

Nos encanta Cuento de Navidad. Tiene todos los elementos que debe reunir una gran historia. Te atreves a iniciar su lectura tal día como hoy?!. Anímate !

ST y Feliz Navidad!!!


viernes, 12 de diciembre de 2014

"Platero y yo" cumple 100 años, felicidades!

Platero, hecho de acero y plata de luna, es toda una fábula, un relato sobre la vida de Moguer, sus calles y sus gentes. Un texto lleno de símbolos, sugerencias y metáforas, como las mariposas,  la muerte, la sangre, el amor o el dolor e incluso la locura. No hay otro burrito más longevo que Platero, que aún muerto y enterrado en su Moguer, es el motivo de que mujeres y hombres de todo el mundo se unan bajo su figura para conmemorar su salida a la luz en 1914.


Hoy cumple 100 años y muchas son las curiosidades sobre el autor de Platero y su novela tan querida y apreciada por todos y cada uno de nosotros.

 Entre otras, sabemos que Juan Ramón había nacido el 23 de diciembre de 1881, a las doce de la noche. Mas como la hora se prestaba a todo, él prefirió “el instante hacia el futuro”, de manera que cifraba su nacimiento el 24 de diciembre. Luego incluso aproximó el acontecimiento a la noche del citado día, esto es, en la misma Navidad. Esta confusión la mantuvo hasta sus últimos años. 

Respecto a Moguer, fue todo para Juan Ramón hasta el punto de llevar siempre una piedrecita de su pueblo en el bolsillo. 
Dicen que Zenobia pudo haberla conocido en la Rábida, donde vivió un tiempo mientras su padre, Raimundo Camprubí, realizaba unos trabajos de ingeniería. Pero esto sabemos que no fue así y el encuentro se produjo años más tarde (1913) en Madrid. ( Aunque vaya coincidencias;). El tono agradable de la voz y la risa de Zenobia fueron los primeros impactos “amorosos” que recibió Juan Ramón de quien después sería su esposa. 
Ajuar de novia de Zenobia. Se casaron en Nueva York.

Platero y yo tuvo una primera edición como libro escolar “ con pasta de florecitas y dibujos elementales” que por supuesto no fue del agrado del autor.
Primera Edición expuesta en Moguer.

Es muy célebre el párrafo inicial ;
"Platero es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos. Sólo los espejos de azabache de sus ojos son duros cual dos escarabajos de cristal negro. Lo dejo suelto y se va al prado y acaricia tibiamente, rozándolas apenas, las florecillas rosas, celestes y gualdas... Lo llamo dulcemente: ¿Platero?, y viene a mí con un trotecillo alegre, que parece que se ríe, en no sé qué cascabeleo ideal..."

El poeta tenía la intención de ampliar el texto hasta los 190 capítulos; de hecho, existen tres adicionales, escritos en la década de 1920. Juan Ramón planeó también una segunda parte, denominada Otra vida de Platero, de la que incluso esbozó algunos títulos. Un proyecto que, como el de publicar Platero y yo en cuadernos sueltos, no llegaría nunca a ver la luz.
"Por la cuadra en silencio, encendiéndose cada vez que pasaba por el rayo de sol de la ventanilla, revolaba una bella mariposa de tres colores..."
Y es que "Platero y Yo" es y será siempre una maravillosa obra de la literatura contemporánea.

MP como decía Juan Ramón (meditado para siempre) a lo que añadimos nosotros  ST!
Ilustración original de Fuentepiña obra del mismo autor Juan Ramón Jiménez.





jueves, 11 de diciembre de 2014

Elena Fortún; Encarnación Aragoneses de Urquijo, Celia en la realidad.

Encarnación Aragoneses de Urquijo, más conocida por su pseudónimo literario Elena Fortún, comenzó a escribir para niños en 1928, en la revista Blanco y Negro, resucitando la sección de Gente menuda.



El 24 de junio de 1928 las historias de la niña madrileña Celia Gálvez de Montalbán, que cuestionaba el mundo de los adultos, cuajaron entre los lectores infantiles de manera tal que la editorial Aguilar se interesó por la obra. 



Así fueron viendo la luz títulos tan conocidos como Celia, lo que dice, Celia en el colegio, Celia y sus amigos, Celia novelista o Celia madrecita.



 El último, Celia en la revolución, permaneció inédito hasta hace poco, cuando se editó en 1987 por la editorial Aguilar.

No se comprometió en partido u organización política alguna, pero Encarna Aragoneses siempre fue profundamente católica, y también republicana en el sentido que pensaba que la II República estaba llamada a acabar con el analfabetismo y con la situación de desigualdad que vivía la mujer. 

Sus narraciones extensas han relegado al olvido su narrativa corta, muy abundante y de gran calidad. 
La mayor parte de estas historias se publicaron en las páginas de las revistas ya mencionadas en nuestro blog (Gente MenudaCrónica...) y muchas de ellas fueron recogidas después en dos volúmenes titulados Los cuentos que Celia cuenta a las niñas (1951) y Los cuentos que Celia cuenta a los niños(1952). Pero gran parte de los otros no han vuelto a ver la luz y merecen una adecuada recuperación. 
Desde aquí hacemos un llamamiento a ello!!!!;)



Muchos de los datos biográficos de esta autora, se han rescatado gracias a la labor de la también escritora Carmen Martín Gaite.

Gracias a ella, pudimos descubrir el origen del pseudónimo Elena Fortun que procedía de un personaje original de una novela escrita por su marido, el militar Eusebio Gorbea que quiso siempre ser escritor. Ambos compartían ese amor por la literatura, además de lazos familiares. Eran primos hermanos.



Posteriormente Marisol Dorao ampliaría fielmente la biografía de esta gran autora con una investigación impoluta.
"Los mil sueños de Elena Fortun, Universidad de Cádiz 1999".



Del horror de la guerra y de la complicada situación en la que se vivía dejó testimonio en Celia en la Revolución, un libro crudo y triste, escrito en el exilio.



Su marido se reincorporó al ejército de la II República y acabó alcanzando durante la contienda el grado de comandante. Fortún llegó a plantearse quedarse en España durante los últimos meses de la guerra, pero sabía que su marido no sería capaz de sobrevivir solo en el mundo así que partió al exilio también.
Primero fue Francia y posteriormente Argentina. Permaneció allí hasta finales de los años 40, cuando volvió a España decidida a conseguir una amnistía para su marido que les permitiese volver. Mientras estaba en España, Eusebio Gorbea se suicidó.

Se instaló posteriormente en Barcelona, pasando sus últimos días en Madrid, donde falleció.

En el Parque del Oeste de Madrid hay una escultura a la autora.


Y es que, al contrario de lo que piensan muchas personas, las novelas de Celia y su autora encierran grandes historias y grandes pensamientos. Ella fue una mujer adelantada a su tiempo que lucho por los derechos de la mujer y que tuvo que soñar en un mundo de tinieblas y soledad.



ST!!!