lunes, 9 de octubre de 2017

Los jeroglíficos de la postrimerías.

Si algo de interés tiene la palabra jeroglífico es precisamente el sinónimo "enigmático" y así de esta forma se podría describir la que fue vida de Don Miguel de Mañara; personaje de doble vida; que supo redimir y corregir sus azarosas hazañas tras la muerte de su amada esposa. Pues bien, según se cuenta, una lluviosa y helada noche de diciembre cuando se dispusieron a trasladar los restos del allí ilustre difunto; Don Miguel 
,descubrieron sorprendidos que se encontraba incorrupto y que desprendía un olor a rosas que inundaba toda la sala capitular y parte del Coro de la Iglesia del Hospital.  Justo encima de ese coro y contemplando tal hecho maravilloso se hallaban los dos enigmáticos cuadros del autor sevillano Valdés Leal. Cuadros que fueron encargados por Miguel de Mañara para enfocar la espiritualidad simbólica de la orden de la Caridad .

En "Finis gloriae mundi" (El fin de la gloria del mundo)  aparece, en primer término, un cadáver de un obispo en descomposición, junto a los despojos de dos  órdenes militares.
En la parte alta, una mano angélica muestra una balanza, en cuyos platillos están colocadas las obras buenas y malas que son pesadas en el juicio, con los letreros: Ni más, ni menos: ésta será la equidad del juicio divino.

En la otra obra: In ictu oculi (En un abrir y cerrar de ojos)  aparece un esqueleto, figura de la muerte, que con su guadaña aplasta los despojos desordenados de todo lo que cuenta en este mundo: una tiara, una corona, libros de ciencia, ricos vestidos, etc. Todo lo que va a quedarse aquí después de la muerte y que no ha de servir ...

Dicen que esos objetos; y quiero especificar que esos mismos objetos que porta la canina; están allí ; sí, justo allí donde residen los restos del que sin duda algún día será Santo y que hoy es "venerable".

Tanto la vida de Mañara como estos dos enigmáticos cuadros tienen mucho de lo que reflexionar pero eso y más os lo dejo a vuestras mercedes que así de esta manera gozarán de la visita del Hospital y su Iglesia de la Caridad. Un recorrido espiritual por el barroco sevillano.

ST.